Mobilize soluciona entregas de última milla
- Aprendiendo de los comentarios: hace dos años, Renault Group lanzó el EZ-FLEX, una forma innovadora de afrontar mejor los retos de los servicios de reparto urbano.
- EZ-FLEX es un vehículo utilitario experimental, eléctrico y conectado, con una distancia entre ejes más pequeña de lo habitual, un amplio acceso al asiento del conductor y una zona de carga de diseño ergonómico.
- Mobilize aprovecha la experiencia del EZ-FLEX para diseñar el futuro de los servicios de reparto de última milla.
El llamado reparto de «última milla» es el último eslabón de la cadena logística que deben recorrer los productos comerciales antes de llegar a su destino: tiendas, restaurantes, oficinas o incluso domicilios particulares. No sólo debe ser respetuoso con el medio ambiente, sino que también debe contribuir a que las ciudades sean lugares agradables para vivir.
EZ-Flex: facilitar la entrega urbana
En 2019, Renault Group puso en marcha un proyecto experimental para comprender mejor las necesidades y expectativas de los usuarios del servicio (ayuntamientos, administraciones locales, empresas) trabajando con una serie de socios como La Poste, el Área Metropolitana de Montpellier Méditerranée, el Ayuntamiento de Montpellier y la empresa SEV (Services Ecusson Vert), para recopilar comentarios sobre el terreno.
“Las pruebas de los vehículos EZ-FLEX se realizaron en colaboración con Renault Group y SEV para realizar entregas en todo el centro de la ciudad, en el marco de una logística urbana más amplia; el programa contribuyó a crear un verdadero diálogo entre el gobierno local, el operador logístico SEV y los empresarios para co-construir el futuro de la movilidad y potenciar la imagen del centro de la ciudad como medio para seguir impulsando el crecimiento en toda el área metropolitana. Forma parte de la política voluntarista de nuestra metrópoli para un choque de movilidad en 2025”, subraya Michael Delafosse, Alcalde de Montpellier y Presidente del Área Metropolitana de Montpellier Méditerranée.
Las pruebas se realizaron con el EZ-FLEX, un vehículo ágil, compacto y totalmente eléctrico diseñado para facilitar el acceso a los centros urbanos. Su radio de giro de 4.5 m, facilita la conducción por las calles estrechas de la ciudad.
Se pusieron a disposición de los profesionales, vehículos equipados con sensores para recoger datos de GPS, kilometraje, autonomía, apertura de puertas, velocidad y paradas.
La ergonomía del vehículo se ha diseñado hasta el más mínimo detalle. El acceso extra ancho del asiento del conductor hace que entrar y salir sea un juego de niños, una característica clave para los conductores que realizan numerosas entregas cada día. La carga trasera se ha optimizado gracias a una altura de umbral fácil de usar y a unas puertas que permiten un fácil acceso a todas las áreas de la zona de almacenamiento. Se han probado numerosos módulos traseros para cubrir la gama de necesidades que puedan tener los usuarios profesionales.
Hacia una gama completa de servicios
El ciclo de pruebas inicial finalizará a finales de año y proporcionará a Renault Group una valiosa información que servirá para desarrollar los vehículos de reparto urbano en el futuro. La fase experimental ha confirmado que los usuarios están interesados en los vehículos totalmente eléctricos para una experiencia de conducción más tranquila y relajada, una característica muy apreciada por los conductores de reparto y los habitantes de la ciudad. Además, los usuarios elogiaron el tamaño compacto del vehículo y su manejo con un radio de giro muy ajustado.
Las grandes aberturas laterales, muy apreciadas, que recorren la zona de almacenamiento trasera, no tienen bisagras ni pilares B, lo que facilita la carga y descarga del espacio. El acceso al almacenamiento también es más fácil gracias a las ruedas de pequeño diámetro que hacen que el piso de almacenamiento esté a 70 cm de altura. También se han realizado pruebas con distintas alturas del suelo del compartimento trasero para conseguir una ergonomía óptima que facilite el trabajo de los repartidores.
También se han realizado pruebas con diferentes configuraciones del habitáculo. Los ajustes del asiento del conductor se han rediseñado para facilitar la entrada y la salida, independientemente de la talla del conductor. Durante la fase de pruebas se introdujo una tarjeta de manos libres para abrir y cerrar las puertas, de modo que los conductores no tengan que colocar los paquetes en el suelo.
Se ha prestado especial atención a la seguridad: se ha modificado la colocación de los retrovisores laterales y se han puesto en vertical las secciones de la base del parabrisas para mejorar la visibilidad en las vías urbanas.
Por último, dado que los conductores utilizan la salida del lado del pasajero el 15% de las veces en función del tráfico, ésta se ha facilitado gracias al suelo plano y al asiento del pasajero abatible.
Con la aportación adicional de las conversaciones mantenidas con socios estratégicos, estas pruebas ayudarán a alimentar el trabajo de diseño de Mobilize en el Mobilize Hippo, el vehículo de reparto de última milla de la marca.
Actualmente se está pensando en otros ciclos de pruebas, incluidos los de servicios. La segunda fase de pruebas ayudará a Mobilize a determinar la gama de ofertas que ofrecerá a los clientes profesionales en el futuro. Dichas ofertas incorporarán tanto vehículos como servicios específicamente diseñados para el reparto de última milla.
Jean-Christophe Labarre, Director de Innovación, Asociaciones Estratégicas y Servicios de Movilidad de Mobilize, comenta: «Las pruebas de campo nos ayudan a comprender las necesidades reales de nuestros clientes. La información que recibimos de nuestros socios nos ayuda a diseñar ofertas que se adaptan perfectamente a nuestros futuros clientes, ya sea en términos de vehículos o de servicios asociados”.
Los problemas más recientes de la entrega de última milla
El Foro Económico Mundial estima que el 60% de la población mundial será urbana en 2030. Al mismo tiempo, los hábitos de consumo están cambiando: en 2023, 1/5 de todas las compras se harán por Internet.
La cuestión principal en los próximos años será tener en cuenta y consolidar las expectativas de todas las partes interesadas:
- Clientes/personas: precio, rapidez, soluciones de entrega flexibles
- Comerciantes y empresas: costes de entrega, satisfacción del cliente
- Pueblos y ciudades: calidad de vida (reducir la congestión de las carreteras, las emisiones de CO2 y la contaminación acústica, replantear la planificación urbana, mantener una economía próspera)
- Empresas de transporte y logística: acceso rápido y fácil al destino final (zonas de bajas emisiones, aparcamiento, …), reducción de costes, bienestar de los repartidores