Ciudades que se resisten a las inundaciones
El crecimiento urbano de las grandes ciudades del mundo se ve afectado por las condiciones climáticas que parecen oponerse a su desarrollo. Grandes lluvias e inundaciones parecen colapsar las grandes urbes, deteniendo la vida acelerada que ocurre en ellas y paralizando cualquier esfuerzo de movilización.
Actualmente en la Ciudad de México, sus habitantes han experimentado fuertes lluvias e inundaciones durante la semana debido a las ondas tropicales combinadas con las corrientes producidas por el Huracán Harvey en el Golfo. Ante estos fenómenos naturales, varias ciudades han tomado medidas hacia la movilidad inteligente durante condiciones climáticas extremas.
La Ciudad de México es una de las urbes con mayor concentración poblacional del mundo, por lo tanto las congestiones de tráfico se han convertido en la norma para todos los habitantes de la ciudad. En épocas de lluvias, los tiempos en el tráfico se extienden a horas y muchas de las principales vías suelen inundarse.
Ante esta problemática, se han construido autopistas elevadas de cuota en Periférico, una de las avenidas más importantes y extensas de la ciudad, donde el tráfico circula a una mayor eficiencia que en las vías normales. Su altura reduce la probabilidad de inundación de las vías, además que al momento de entrar en ellas todos sus usuarios están protegidos por un personal de asistencia de respuesta inmediata y sistemas de seguridad para evitar accidentes en las vías mojadas.
Quebec es una de las ciudades de Canadá con más niveles de precipitación registrados en invierno. La constante caída de nieve durante la temporada hace que las autopistas sean resbalosas para los autos. El gobierno canadiense como medida de seguridad ha impulsado la venta de modelos de coches que tengan integrados sistemas de seguridad para nieve.
Uno de los sistemas recomendados por el gobierno de Canadá es Control de Estabilidad Electrónica, ESC en sus siglas en inglés, el cual mantiene el control del vehículo al frenar automáticamente cuando la dirección del volante no coincide con la dirección del vehículo. El sistema ESC podría reducir el 29 por ciento de los accidentes causados por la pérdida del control del vehículo en Canadá.
Otro sistema promovido por el gobierno es el Sistema de Frenos Antibloqueo, el cual igualmente ya está incorporado en la mayoría de los autos vendidos en el país, y controla el movimiento de las llantas al frenar para evitar el derrapaje al momento de frenar.
Wuhan, China
El gobierno chino ha elegido a esta ciudad junto con otras dos para formar parte de una iniciativa, denominada ciudades esponja, de captura de agua durante la época de lluvias. Wuhan, es la ciudad más poblada de China central, con más de 10 millones de habitantes para el 2015 y se encuentra en una zona geográfica propensa a lluvias constantes.
El programa piloto del gobierno consiste de un financiamiento a las ciudades de mil 600 millones de pesos durante tres años para desarrollar sistemas de filtración y almacenamiento de agua, así como calles con desagües y espacios públicos que permitan su absorción. Algunos de estos sistemas son los techos ecológicos con jardinería con sistemas de biofiltración para el uso del agua captada dentro del edificio. El objetivo final de las ciudades esponja será administrar el 60 por ciento de la lluvia que cae en las ciudades para su uso continuo y almacenamiento.
Tokio, Japón
Tokio cuenta con Canal de Descarga Subterránea Exterior del Área Metropolitana, el mayor complejo subterráneo de protección contra inundaciones del mundo. Las instalaciones tienen la capacidad de contener en el agua producida durante las fuertes lluvias, tifones e inclusive los desbordamientos causados por los tsunamis. Esta se canaliza a través de túneles localizados cerca de las zonas más propensas a inundaciones y después de llegar al tanque de almacenamiento se reparte a ríos y cuerpos de agua a una altitud inferior en las afueras de la ciudad.
La enorme infraestructura fue una iniciativa del gobierno japonés iniciada en 1992 y terminada en 2009, con una inversión total de aproximadamente 32 mil millones de pesos, lo anterior de acuerdo a un estudio sobre medidas internacionales de seguridad vial durante las épocas de lluvias y de protección contra inundaciones, generado con la ayuda de OHL México
