¿Cuál es el parque vehicular en México?
Actualmente en el mercado automotriz mexicano existe una oferta importante de estudios de parque vehicular en México por parte de distintas firmas consultoras que aseveran contener y mostrar la realidad más cercana a los vehículos que circulan en territorio nacional.
Pero la pregunta que debe ser hecha es ¿Qué tan cierta podría ser? O al menos ¿Cuánta confianza podría poner una compañía automotriz en dicha información muy a pesar de que ésta pudiera parecer atractiva por su amplia cobertura y/o su amplia información que oferta?
¿Qué contenga información con amplio detalle significa confiable o cercana a la realidad? Entonces si todo esto no da confiabilidad ¿Qué se debe considerar para ser confiable o veraz la información que contenga el estudio de parque vehicular?
Cabe señalar que, el parque vehicular mexicano está compuesto de una diversidad de marcas debido, principalmente, a la gran apertura que México tiene en el mundo a consecuencia de los distintos tratados comerciales.
Debe considerarse también la fuerte “invasión” histórica que ha sufrido el país a causa de la entrada indiscriminada de vehículos ilegales –propiciado por decretos y promesas gubernamentales para su libre circulación de forma permisionaria o regularizada (legalizada).
Entonces ¿Cómo afrontan las distintas consultoras toda esa información para hacer el cálculo y cómo participan todas éstas con los involucrados (asociaciones, armadoras, entidades gubernamentales, etc.) para poder generar tal estudio?
Ahora bien, a lo largo de la historia de México, la información que se utiliza para la elaboración del cálculo del parque vehicular en el país ha dado bastantes giros –tanto positivos como negativos-, tal que algunos de éstos han permanecido hasta nuestros días y, en muchos casos, han ensombrecido y entorpecido la información necesaria para la elaboración de éste.
Lo que ha provocado que no exista al día de hoy una base de información totalmente confiable y completa de los vehículos por parte de asociaciones, armadoras, organizaciones y gobierno que son los responsables de generar los datos principales que permite a las consultoras elaborar un estudio completo y fiable, como en otros países.
Por ello, las firmas consultoras están obligadas a depurar a conciencia toda la información obtenida por parte de los actores involucrados si desean generar un estudio lo más cercano a la realidad.
Es de destacar la transformación que se vivió en México en el 2011 con el cierre de la información detallada de vehículos medianos y pesados, así como de vehículos marinos, mineros, etc.
Lo que ocasionó un reajuste para las compañías consultoras en la información que realizaban del parque vehicular en México. Este cierre persiste hasta el día de hoy y provoca que este parque vehicular permanezca –parcial y total según el tipo de vehículo- en la “oscuridad” y muchas firmas consultoras lo omitan en sus reportes y quienes la incluyan solo lo consideren de manera general -vehículos medianos y pesados-.
En lo que respecta a vehículos denominados motocicletas, el cierre se ha mantenido hermético desde sus inicios y todas las armadoras, así como asociaciones y parte gubernamental bloquean cualquier intento de realizar un estudio de ese parque, y no es de extrañar que hasta entre ellos hay diferencias en sus cifras.
Es de hacer notar que conforme va avanzando la industria automotriz se han generado nuevas fuentes de datos que permiten completar aún más el portafolio de requerimientos actuales que la compañías automotrices demandan para su planificación y desarrollo de negocios; sin embargo, esto no necesariamente tendrá una confiabilidad, una veracidad y una utilidad total si la información elaborada con estos datos no está bien tratada.
Otro punto a considerar, y posiblemente uno de los más importantes factores en la elaboración del estudio, es bajo qué parámetros la firma consultora elabora el estudio de parque vehicular (y esto aplica para todos los países en los que participa con ese estudio).
Como análisis de reflexión se puede destacar lo siguiente, una empresa consultora global puede obtener información valiosa de una armadora desde sus oficinas centrales y supone que esta información es veraz del todo para el país que analiza, es decir, considerar que si la armadora menciona que cierto modelo se comercializa en alguna región del mundo se cumple para toda la región, por ejemplo si la armadora
A menciona que su modelo 1 se vende en Norteamérica, la consultora infiere que este modelo se comercializa tanto en Canadá, E.U.A. y México, cuando podría ser que en México ese vehículo no estuvo o no está a la venta.
Asimismo, la mayoría de las firmas consultoras tienden a analizar –con toda la recopilación de la información que obtuvieron de armadoras, asociaciones y/o gobiernos- el mercado automotriz, en particular el parque vehicular, desde su país de origen y pocas veces se involucran en analizar el parque vehicular desde la nación en cuestión, lo que en muchos casos provocará errores significativos en el análisis final, es decir, si la consultora tiene su origen en E.U.A. elaboran (con la información recopilada) el parque vehicular de México desde E.U.A. y no desde México, es más, en muchos casos adaptan sus números a lo que el mismo gobierno dice que hay circulando sin verificar si dicha información es confiable (recordemos que no toda la información generada por un gobierno es confiable debido a las políticas públicas, burocracia y otros factores que generan errores en los datos finales que dan a conocer), en otros casos se ajustan a lo que su competencia señala.
También ocurre que las consultoras toman información de bases estadounidenses y/o europeas para adaptar estos datos a los vehículos que circulan en México y, en muchos casos, hay información que desconocen porque en los mercados desde donde elaboran o analizan el parque vehicular mexicano no existe tal información, ejemplo, hoy en día, hay bastantes armadoras asiáticas –principalmente chinas- que operan en México pero no en E.U.A., Canadá o Europa y como las consultoras generalmente toman la información proveniente de los organismos estadounidenses y/o europeos como certeros, utilizan solamente los datos de organismos mexicanos tal como ellos lo informan, sin verificar otras fuentes, para dar a conocer datos de estas armadoras.
Este último punto también sucede con las compañías extranjeras que generan información y que usan las propias consultoras para dar detalles del estudio que elaboran del parque vehicular del país, es más estas empresas no contemplan a las armadoras que no operan en su nación.
Y se complica cuando estas compañías generadoras también solo cuentan con información reciente y desconocen algunos detalles de vehículos más antiguos por lo que las consultoras que elaboran el estudio de parque vehicular omiten estos datos.
La base ACES es un claro ejemplo de una compañía generadora de datos que actualmente es muy empleada por las consultoras para adaptar su estudio de parque vehicular pero omite o desconoce información de vehículos antiguos o de armadoras que no operan en E.U.A. y Canadá, pero que tienen actividad en México, también es de hacer notar que es de las pocas que ha ido mejorando y nutriendo su información con el tiempo.
Sin embargo, las firmas consultoras omiten a sus clientes este detalle y la base ACES toma datos desde E.U.A. y Canadá pero en muchos casos los supone para México.
Ahora bien, en estos últimos años, muchas empresas automotrices se han focalizado en buscar detalles técnicos sobre los modelos y han descuidado el cálculo estadístico que permita darles a conocer el volumen de las unidades circulantes y con estos realizar estudios que les permitan desarrollar mercados más inteligentes para sus negocios.
Entonces ¿Qué resulta más importante para una compañía automotriz para analizar el parque vehicular en México? La respuesta es sencilla, tanto el volumen como los datos a detalle del vehículo a consultar son importantes, pero se debe contar y analizar los detalles desde el punto del volumen, porque esto nos llevaría a cuestionar el ¿de qué sirve contar con un detalle técnico exhaustivo de un vehículo si el volumen es incorrecto?
Ya que si suponemos que contamos con los detalles técnicos de un modelo 2 pero sus valores son incorrectos, la empresa automotriz que utilice la información para calcular la producción, distribución, mercado meta, entre otros, equivocará su inteligencia de mercado al momento de apostar por cubrir un volumen de mercado inexistente.
En conclusión, la mayoría de las compañías consultoras –incluidas las más prestigiosas- que elaboran estudios de parque vehicular para distintos países utilizan el análisis del supuesto para hacer el cálculo y desconocen muchos detalles del parque vehicular del país que analizan, en otros utilizan modelos estadísticos entre países que suponen similares entre sí y en otros toman referencias de los gobiernos para adaptar su estudio, y la lista se agranda a medida que uno se adentra a conocer más sobre el tema del parque vehicular y de los procedimientos que estas firmas consultoras y las empresas generadoras de datos llevan a cabo.
El caso de México no es la excepción a esa regla que siguen las grandes consultoras automotrices.
Por tanto, es importante que una compañía automotriz al momento de adquirir información de parque vehicular con alguna consultora –no importa si es la menos o la más prestigiosa- haga los cuestionamientos necesarios a ésta para determinar si realmente está adquiriendo datos confiables respecto a éste pues de eso depende su planeación y desarrollo de negocio.
El presente boletín es dar a conocer un panorama actual breve y general en México de la forma en la que la información automotriz ha ido desarrollándose e interactuando para elaborar el parque vehicular mexicano.