El Bajío mexicano dio bienvenida a la Carrera Panamericana en su 30 Aniversario
De nueva cuenta los seguidores de la única competición en el mundo a carretera abierta acamparon por horas en los caminos para disfrutar de los autos clásicos más veloces en su paso por las carreteras mexicanas que este lunes conectaron a Morelia, Michoacán con el estado de Guanajuato.
Luego de culminar el día 3 de competencia con el studebaker 139, «El Malditillo», en la punta de la tabla de tiempos; comenzó la actividad del lunes con el paso, por segunda vez, sobre La Cascada, Mil Cumbres y Huajúmbaro.
En las primeras dos, de nueva cuenta Ricardo Cordero y Marco Hernández, ganaron ambas pruebas seguidos de cerca por Emilio Velázquez y Javier Marín.
El Commander de Hilaire y Laura Damiron, cerraron la visita en Michoacán, ganando la etapa 26 en Huajúmbaro.
Al entrar a Guanajuato, la tendencia siguió a favor de los actuales campeones, quienes se adjudicaron Los Quiotes y La Valenciana, resultados que bastaron para terminar con el mejor crono en el cuarto día en la categoría Turismo Mayor con una diferencia de dos segundos solamente.
Los siguientes competidores se colocaron este lunes, Cordero y Hernández del auto 139.
Emilio Velázquez junto a Javier Marín a bordo del «Golden Tiger» cruzaron la meta de Guanajuato como terceros.
Este día nos encontramos marcando prácticamente la mitad de la competencia. Mañana, La Carrera Panamericana en su edición 30 se trasladará al estado de San Luis Potosí.
Para llegar a esta ciudad, el contingente panamericano hará etapas de velocidad por La Valenciana y Santa Rosa. Realizará su servicio en el Parador Potosino para pasar a las etapas de Valle de los Fantasmas, la cual representa una de las pruebas más difíciles de La Carrera, para pasar por Las Rusias. Después hará una vuelta en “U” y pasará por Santa Catarina y San Francisco. Llegará finalmente al Arco de Meta en la Plaza de los Fundadores donde los autos clásicos con sus competidores intercambiarán experiencias con todos los aficionados potosinos.
