Recubrimientos contra fuego para los vehículos eléctricos
La demanda de vehículos eléctricos es una tendencia en aumento, por esta razón, la industria automotriz está buscando cada vez más soluciones a problemáticas como la eficiencia y rango de alcance del vehículo, el tiempo de carga y los costos de fabricación.
Sin embargo, el aumento en la eficacia puede presentar un riesgo potencial de incendios en la batería de los autos eléctricos.
Los fabricantes de automóviles eléctricos han impulsado los límites de rendimiento de los paquetes de energía al mejorar el rango del automóvil y disminuir el tiempo de carga, ya que estas variables son claves para superar las barreras de adopción por parte de los consumidores.
Esto ha llevado a objetivos para aumentar la densidad de energía en el paquete de baterías que se están cumpliendo mediante el desarrollo de materiales activos de almacenamiento que cuentan con formatos de celdas de mayor capacidad.
Lo anterior, permite que los vehículos viajen más lejos, pero al aumentar la energía almacenada en el paquete de carga y hacer la transición a químicas de batería cada vez más sensibles a la temperatura, también aumenta el riesgo de incendios.
Para encontrar una solución a estas necesidades, se están desarrollando nuevas tecnologías. Una de las últimas soluciones al servicio del mercado es la oferta desarrollada por PPG – empresa propietaria de Comex-, que cuenta con una unidad de negocio especializada en el desarrollo de recubrimientos para la industria automotriz.
Esta nueva tecnología se encuentra en un recubrimiento que vincula cátodos que ayudan a mejorar la ionización de las baterías de litio, aumentando su eficiencia, seguridad para el usuario, protección dieléctrica, gestión térmica, resguardo contra incendios, sellado, unión, blindaje contra interferencias de radiofrecuencia (RFI) y otros beneficios importantes que garantizan la optimización de la energía de forma más segura.
“En PPG estamos desarrollando tecnología de punta en recubrimientos para que de esta forma podamos contribuir a la industria de baterías y componentes a través del desarrollo de soluciones de almacenamiento de energía del futuro. Estamos seguros de que la industria de automóviles eléctricos verá una aceleración en la adopción de los mismos conforme bajen los costos de fabricación”; mencionó Miguel Martínez, Director de Negocio Automotriz OEM de PPG.
Las soluciones en recubrimientos para baterías deben de estar enfocadas en mejorar el desempeño de estas, cuidar la seguridad de los pasajeros al tener protección contra incendios, incentivar la instalación automatizada en planta y reducir los costos de materiales y operativos.
La industria automotriz se encuentra en la cúspide de una transición a vehículos eléctricos, este cambio de paradigma ya es una realidad en las principales automotrices desarrolladoras de tecnología. Por ejemplo, en marzo de 2021, una de las automotrices líderes en el sector premium, anunció que dejaría de desarrollar motores de combustión tradicionales, ya que para 2025 planean ofrecer 20 distintas ofertas de vehículos eléctricos.
En el mismo período de tiempo, uno de los mayores fabricantes de autos de origen Alemán, espera que los vehículos eléctricos representen entre el 15% y el 25% de las ventas globales.
Es por ello que, los fabricantes de equipos originales de vehículos eléctricos (OEM) que deseen liderar el mercado, deben tener la capacidad de integrar de forma segura los paquetes de baterías de alta capacidad y alto rendimiento que hacen que los vehículos eléctricos sean competitivos con los vehículos tradicionales, y esto solo lo podrán lograr implementando tecnología de recubrimientos de punta que garantice una mayor eficiencia, así como mayores estándares de seguridad.
Si bien es indiscutible un alejamiento global de los combustibles fósiles, se está produciendo un desarrollo extremadamente rápido de nuevos sistemas de propulsión en ausencia de estándares nacionales o globales adecuados para la seguridad de las baterías, razón por la que es de suma importancia adelantarse a las necesidades regulatorias y escuchar las inquietudes de los usuarios para brindarles la seguridad esperada.
