Olinia dependerá de la coordinación del Gobierno Federal, la Iniciativa Privada y las Universidades
-Olinia no debería quedarse solamente en la declaración o fervor político.
-La integración de la gran cadena de proveedores en México, será fundamental.
“Para profesores y doctores en Ingeniería del CETYS Universidad, el desarrollo de un vehículo eléctrico propio del Gobierno Federal con la marca Olinia, puede llegar a ser un gran proyecto, y no quedarse solamente en la declaración o fervor político. Y ello dependerá de la colaboración estratégica entre el Gobierno Federal, la Iniciativa Privada y las Universidades.
“El éxito depende también de la integración de las universidades y hasta de preparatorias, porque México ha demostrado que tiene talento en sus ingenieros; hay capacidades suficientes. Sin dejar de mencionar la integración de toda la cadena de suministro de proveedores de autopartes, y componentes que ya operan en este país.
“Sin duda este nuevo proyecto no requerirá de grandes inversiones, porque no hay que partir de cero, es decir, ya existen muchos desarrollos que se pueden retomar con esa gran cantidad de proveedores que hay en México”, así lo dijeron en entrevista los profesores y doctores Juan Andrés Rivera, y Luis Carlos Básaca, del CETYS Campus Mexicali.
Profesores con estudios en Ingeniería Mecánica, Nano Componentes Electromovilidad, y con experiencia en Desarrollo de Vehículos Eléctricos, quienes agregaron que se cuenta con el “know how” para este desarrollo, así es que habría que coordinar a las partes antes mencionadas, y sobre todo, tomar muy en cuenta este desarrollo con el entorno comercial internacional que se vive con los aranceles, y que invita a contar con desarrollos propios.
“Así es que el proyecto Olinia es interesante, en el que sin duda hay una brecha intimidante ante la gran competencia internacional en el sector automotriz, con grandes desarrollos tecnológicos, con países y marcas que ya cuenta con la segunda o tercera generación en el desarrollo de motores eléctricos y de baterías, como es el caso de Tesla, BYD y Kia”, dijeron.
Los modelos de Olinia en un principio serán muy básicos en su tecnología, aunque deberán cumplir con los criterios mínimos de competencia internacionales, en términos de seguridad, como las bolsas de aire, y la incorporación de sensores, entre otros componentes.
En los temas de desarrollos eléctricos, sin duda México tiene un rezago en baterías, pero ya cuenta con algunas experiencias en la Fórmula SAE, que consiste precisamente en el desarrollo de bancos de baterías, como grandes semilleros, dijeron los entrevistados.
De manera paralela, el consumidor mexicano es muy exigente en los niveles de equipamiento en los vehículos, y los modelos de Olinia deberán incorporar los mínimos indispensables, dijeron los entrevistados.
